"Sí a todo lo que sume": Los aprendizajes de dos emprendedoras desde el tanque de Shark Tank Colombia Verónica Bacci y Paulina Franco hablaron con nosotros sobre las lecciones aprendidas al salir del tanque.
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Shark Tank Colombia estrenó su sexta temporada en septiembre, estableciéndose de nuevo como la plataforma para que emprendedores de todos los rincones del país presenten sus proyectos ante un panel de jueces y potenciales inversionistas, 'tiburones.'
Los resultados varían dependiendo de la propuesta de valor de los emprendimientos y de los intereses de los tiburones, quienes pueden sumarse como inversionistas, co-fundadores, o socios estratégicos.
En su más reciente episodio, dos emprendedoras presentaron su propuesta de moda sostenible, New For You (NFY), que utiliza excedentes del sector textil para confeccionar prendas de edición limitada.
"Estamos buscando un tiburón que no solo quiera hacer equipo con nosotras, sino que a su vez confíe y le apueste a que NFY tiene el potencial suficiente para convertirse en la marca de moda colombiana sostenible más grande del mundo," dijeron las fundadoras Verónica Bacci y Paulina Franco en su pitch.
Luego de recibir una inversión de $110 millones de pesos colombianos (aproximadamente $27,500 dólares) por parte de uno de los tiburones, las emprendedoras hablaron con Entrepreneur en Español sobre sus lecciones al salir del tanque.
"No teníamos en mente recibir una inversión externa en ese momento porque estábamos bien trabajando con nuestro capital, ya NFY rodaba solo, y creo que el hecho de recibir inversión externa supone una gran responsabilidad", dice Franco.
El proceso para llegar a presentarse ante los tiburones comenzó con un mensaje que las emprendedoras recibieron a través de redes sociales. Aunque normalmente los emprendedores interesados pueden registrarse en la página web de Shark Tank, este no fue el caso para NFY.
"Decidimos participar sabiendo que NFY es un emprendimiento pequeño. Al ser espectadora de Shark Tank, la duda es, ¿yo sí voy a ser suficiente?", explica Bacci.
Las emprendedoras, ambas de 24 años, tuvieron un mes para prepararse antes de la grabación. Además de procesos necesarios requeridos por Shark Tank, como llenar formularios y realizar entrevistas, debían desarrollar un pitch que pudiera cautivar a los tiburones.
Con el apoyo de un asesor, Bacci y Franco prepararon el pitch en bloques, basados en temas de interés: primero una introducción al propósito de NFY, luego una exploración del ADN de la propuesta, y finalmente, una explicación sobre la trascendencia social, cultural y ecológica de la marca.
"Practicábamos todos los días. Fue una decisión que nos ha ayudado mucho, porque tener un pitch es fundamental y quizás no lo hubiéramos tenido tan sólido sin Shark Tank", dice Franco.
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Previo a la grabación, las emprendedoras también tuvieron que aclarar cuestiones del funcionamiento financiero de NFY como sus ventas anuales y mensuales, el ticket promedio de venta, la proyección de su modelo de negocio a corto, mediano y largo plazo, y la tasa de recompra.
Aunque en el tanque fueron rechazadas por cuatro de los tiburones, uno de ellos sí decidió apostarle a NFY. "Necesito que trabajemos juntos en el plan de negocio de esto, y esa es mi condición", dijo el inversionista Álvaro Rodríguez al ofrecerles $110 millones de pesos colombianos por el 33% de la empresa.
"Luego de recibir la oferta, pedimos un tiempo para hablar entre nosotras, y nos preguntábamos qué hacer. Es una negociación muy rápida, y aunque estábamos esperando no subirnos a más del 15% de participación por la inversión, al final nos comprometimos con el 30%", dice Franco.
Aunque el episodio se grabó en mayo y salió a finales de octubre, hay todavía diligencias pendientes para que la negociación se mantenga. Pero ambas fundadoras reconocen el gran logro que fue poder dar a conocer su marca, y conectar con personas con tanta experiencia en el mundo empresarial.
Las fundadoras también resaltan que hay dos decisiones claves. Primero, el decidir registrarse. Para esto, es muy importante saber que el programa puede abrir las puertas a inversión externa, como también para socios estratégicos, visibilización, y consejos de los tiburones.
"Una parte fundamental es la retroalimentación que te puedan dar los tiburones. Sea que inviertan o no, el hecho de poder presentarle tu modelo de negocio a personas que tienen tanta experiencia, es algo que aporta muchísimo", comenta Bacci. Su participación no es casualidad, entonces, pues el lema de NFY es "Sí. A todo lo que sume".
Segundo, si se lanza al tanque, es importante estudiar los requisitos de participación del programa, pero también aquellos que se necesiten para mantener a flote una posible negociación. Franco señala especialmente la disciplina en cuanto al estudio pre-producción, la organización de los inventarios, y la revisión de canales digitales para dar la mejor impresión posible. Y no solo a los tiburones, sino a las audiencias del programa.
"NFY es una marca que vende, una idea que gusta, es visualmente atractiva, pero por eso necesitamos llegar a más personas, y atraer de manera orgánica es difícil", dice Franco.
Ahora, NFY se enfocará en su nuevo espacio físico, y en desarrollar estrategias para dar a conocer su emprendimiento y mejorar el diseño de sus productos. Además de una posible inyección de capital, su experiencia en Shark Tank les ayudó a afinar su propuesta de valor, el ADN de su marca, y a materializar los objetivos abstractos que llevaban intentando visualizar durante dos años de operación.
"Son oportunidades de la vida, y hay que tomarlas, porque son el resultado de mucho esfuerzo, trabajo en equipo, y un gran propósito claro y coherente", concluye Franco.
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