OpenAI apunta a una valuación de más de $150,000 millones de dólares al tiempo que libera un modelo de IA aún más poderoso La empresa liderada por Sam Altman sigue atrayendo inversiones millonarias mientras revoluciona el sector con su nuevo modelo de inteligencia artificial.

Si has estado revisando los trending topics en X esta mañana, posiblemente hayas notado que OpenAI es uno de ellos.

La empresa liderada por Sam Altman está dando de qué hablar (sí, una vez más), gracias a una nueva ronda de inversión de alrededor de $6,500 millones de dólares, que llevaría a la empresa a una valuación de $150,000 millones de dólares, eso pese a las dudas que existen en torno al potencial real que tiene el sector de la inteligencia artificial (IA).

Según The New York Times, apenas la semana pasada, OpenAI buscaba una ronda de inversión de $1,000 millones de dólares, para llegar a una valuación de $100,000 millones. Pero ante la perspectiva de que la empresa todavía tiene mucho margen para crecer, los inversionistas se han entusiasmado y todo indica que inyectarán aún más capital a la empresa.

Hace algunos días, OpenAI anunció que había superado al millón de usuarios pagados entre las diversas versiones de sus productos (ChatGPT, ChatGPT Enterprise, Team y Edu, así como Dall-E).

Apenas hace un par de meses, en abril, la empresa contaba con 600,000 usuarios. El acelerado ritmo de crecimiento en el número de usuarios pagados explica, sin duda, la postura de los inversionistas para seguir inyectando capital a la empresa. Entre los fondos y compañías que han respaldado a Sam Altman y a OpenAI, se encuentran Microsoft, Apple, Nvidia, Thrive Capital, Y Combiantor y Khosla Ventures, entre otras.

Un nuevo modelo: grandes promesas para el futuro próximo

Pese a ser hoy el líder en el rubro de modelos y plataformas de inteligencia artificial (según un estudio de IOT Analytics, la empresa contaba en diciembre de 2023 con un 39% de la cuota de mercado), OpenAI sigue innovando y su próximo modelo de IA generativa promete revolucionar al mercado.

Hace un par de días la empresa dio señales de pretender liberar Strawberry, su nuevo modelo, en cuestión de semanas. Hoy, en las tendencias de X, varios usuarios dijeron haber utilizado ya la herramienta y aseguraban que el modelo puede "pensar" antes de responder y que es mejor al resolver problemas matemáticos y de programación.

Desde su perfil de X, OpenAI anunció que ha liberado ya una versión previa de OpenA1 o1, una serie de modelos que se detienen a pensar en su respuesta, antes de entregarla a los usuarios. La empresa explicó: "Estos modelos pueden razonar sobre tareas complejas y resolver problemas más difíciles que los modelos anteriores en ciencia, programación y matemáticas".

We're releasing a preview of OpenAI o1—a new series of AI models designed to spend more time thinking before they respond.

These models can reason through complex tasks and solve harder problems than previous models in science, coding, and math. https://t.co/peKzzKX1bu

— OpenAI (@OpenAI) September 12, 2024

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Los nubarrones en el horizonte

Pero aunque el futuro luce prometedor para la empresa, existen grandes desafíos que deberá de ir resolviendo en el camino.

El primero de ellos son sus costos de operación. Según The New York Times la empresa gasta cerca de $7,000 millones de dólares al año en investigación y desarrollo, y se ha visto obligada a contratar cada vez más empleados.

Para mantenerse a la cabeza, debe de innovar de manera permanente e invertir en hardware costoso y escaso. Ayer Jensen Huang, CEO de Nvidia, declaró que la relación con sus clientes se ha tensado debido a falta de producto en el mercado para satisfacer sus necesidades.

La competencia es feroz y empresas como Anthropic, Meta y Microsoft (amiga y rival de OpenAI) trabajan arduamente para desarrollar productos que compitan al tú por tú con la compañía dirigida por Altman.

Además están las demandas de medios de comunicación, artistas, escritores y creadores de contenido que han acusado de manera reiterada a la empresa de utilizar su obra sin autorización.

Y hay que mencionar la iniciativa de diversos países y uniones para regular el uso de la IA en distintas regiones y para revisar a fondo el uso que las plataformas hacen de la data de los usuarios para poder operar.

Hoy el futuro luce prometedor para OpenAI, pero el verdadero desafío será cómo gestiona la empresa su crecimiento sin perder el ritmo de innovación, ni su posición de liderazgo en un competido sector.