Estas son las 7 preguntas que te tienes que hacer antes de usar IA Existen muchas herramientas de inteligencia artificial (IA) en el mercado, pero ¿son adecuadas para tu negocio?

Aunque es una especialista en todo, desde la investigación legal hasta la automatización del marketing, la inteligencia artificial (IA) tiene el potencial de ahorrarte dinero, hacerte más eficiente y, en última instancia, ayudar a tu negocio a generar mejores resultados, pero eso no basta para que sea una garantía.

¿Cómo decidir si una herramienta de IA en particular es una inversión que vale la pena para tu negocio?

Tipos de herramientas de IA

Hay herramientas que se enfocan en aplicar IA a una tarea específica, así como herramientas que integran elementos de inteligencia artificial en su funcionamiento general. Las herramientas de IA generativa pueden crear contenido escrito, visual y de audio desde cero. Otras herramientas de IA se centran en la productividad y la automatización, permitiendo a los trabajadores hacer más en menos tiempo. Las herramientas de IA orientadas al análisis y la obtención de información también están diseñadas para procesar datos y extraer información más rápido y mejor que sus contrapartes humanas.

Estas herramientas tienen algo que ofrecer, y algunas intentan combinar elementos de estas categorías bajo un único paraguas de usabilidad.

Algunos productos de IA combinan elementos de diferentes tipos de herramientas de inteligencia artificial para aplicaciones específicas. La IA legal, por ejemplo, ofrece funcionalidades como IA generativa, que puede ayudar a desarrollar contratos comerciales desde cero; IA centrada en la productividad, que puede agilizar la investigación legal; e incluso análisis de datos, permitiendo a abogados y empresarios con necesidades legales examinar y analizar grandes conjuntos de datos sin tener que perderse en los detalles.

En la superficie, muchas de estas herramientas parecen ser adiciones perfectas que pueden mejorar un negocio. Pero hay varios matices que considerar.

Frecuentemente los negocios construyen su reputación en base a la precisión, integridad y consistencia. Muchos dueños de negocios apreciarían la idea de lograr una mayor productividad o completar su trabajo en menos tiempo con ayuda de la IA, pero incluso un pequeño error en el contexto legal puede tener consecuencias catastróficas, por lo que muchos abogados y empresarios con necesidades legales son reacios a adoptar herramientas de inteligencia artificial.

Muchos profesionales en otras áreas comparten estas preocupaciones.

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La burbuja de la IA

De manera razonable, los expertos han sugerido que el reciente entusiasmo en torno a la IA comparte similitudes con una burbuja financiera. En los últimos años, hemos visto una explosión en el interés público por la IA, y por razones comprensibles. Los grandes avances en términos de potencial de IA generativa y procesamiento de lenguaje natural han permitido que la inteligencia artificial haga más de lo que jamás había podido hacer.

Sin embargo, esto ha llevado a una sobrevaloración masiva. La gente cree que la IA tiene más capacidades de las que en realidad posee, y a veces confía en que haga más de lo que realmente puede. Además, las empresas que se dedican a la investigación y desarrollo de IA están siendo sobrecompradas y sobrevaloradas, pues la gente anticipa una revolución total de la IA que aún no se ha materializado.

Eso no significa que el potencial a largo plazo de la IA esté limitado o que no existan grandes avances. Pero solo que reconocer que hay una brecha entre la percepción pública de la IA y la realidad de la IA.

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Preguntas para ayudarte a evaluar herramientas de IA

Entonces, ¿cómo puedes saber si una herramienta de IA es adecuada para tu negocio?

Las dos categorías más importantes que debes considerar son el ajuste y el retorno de inversión (ROI).

Del lado del ajuste, debes de considerar si una herramienta en particular va a servir a tu organización de una manera adecuada y práctica. En el lado del ROI, debes considerar si los costos de la herramienta se compensarán con beneficios medibles.

Para ayudarte a determinar los dos lados de la ecuación, hazte las siguientes preguntas:

1. ¿Qué problema está resolviendo? Primero, averigua si esta herramienta está resolviendo un problema en particular y cuál es ese problema. Si no puedes identificar qué es lo que realmente hace esta herramienta, descártala.
2. ¿Puede esta herramienta realmente hacer lo que dice? La mayoría de las herramientas de IA se comercializan como aplicaciones innovadoras, revolucionarias, pero no todas cumplen con esas promesas. No te creas el marketing; prueba la herramienta y ve si cumple con tus expectativas.
3. ¿Cuánto tiempo ahorrará? En lugar de especular, intenta hacer cálculos y determinar exactamente cuánto tiempo te ahorrará la herramienta. De nuevo, haz los cálculos tú mismo; no creas todo lo que te dice el sitio web.
4. ¿Cuánto valor añadirá? Incluyendo el ahorro de tiempo, ¿cuánto valor añadirá a tu organización? ¿Podrás ofrecer nuevos productos y servicios a tus clientes? ¿Ofrece un camino para generar nuevos ingresos?
5. ¿Cuánto costará? Obviamente, también deberás considerar el costo de la herramienta. Muchas herramientas de IA tienen el potencial de ayudarte a lograr mejores resultados, pero si son demasiado caras, puede que no valgan la inversión.
6. ¿Cuánto tiempo costará? Es fácil calcular cuánto dinero te costará una herramienta, pero ¿cuánto tiempo te costará? ¿Necesitarás educar y capacitar a las personas para usarla? ¿Necesitarás practicar la resolución de problemas y el reentrenamiento periódico? ¿Tienes que practicar la ingeniería de instrucciones (prompts) para obtener los resultados que deseas? ¿Qué tan problemático será si este servicio falla?
7. ¿Cuántas otras herramientas estamos usando? Muchas empresas ya están luchando con la sobrecarga de herramientas de inteligencia artificial. Tener demasiadas herramientas tecnológicas compitiendo en el mismo entorno puede resultar abrumador para los usuarios y excesivamente caro. La mayoría de las organizaciones se benefician más al usar menos herramientas, pero más efectivas, favoreciendo un enfoque minimalista y optimizado que puede llevar a un rendimiento superior.

Con un análisis crítico, debería ser mucho más fácil determinar si una herramienta de inteligencia artificial en particular vale la pena para tu negocio. Independientemente de si crees que la IA está sobrevalorada, infravalorada o en un punto medio, es importante tratar cada adquisición tecnológica en tu negocio con la debida diligencia y tomarse en serio cada inversión en la empresa.