Del rechazo a la redirección: 4 maneras de manejar cada 'no' con resiliencia y determinación En lugar de ser vistas como obstáculos, las desviaciones inesperadas en el camino pueden servir de guía para el éxito.
Por Charity Hudnall Editado por Eduardo Scheffler Zawadzki
Key Takeaways
- Los "no" no son obstáculos; son desvíos que nos señalan el camino hacia nuevas oportunidades.
- Si cambias tu mentalidad, los contratiempos pueden ser vistos como escalones hacia algo mejor.
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Afrontémoslo, puede ser desalentador escuchar la palabra "no" a lo largo de tu carrera, especialmente cuando buscas la oportunidad de demostrar tu valía. Pero ahí es donde entran en juego la resiliencia, el trabajo duro, la determinación y la voluntad. Cuando solicité una oportunidad en una pequeña empresa de marketing como recién graduada de la universidad, tenía los ojos puestos en una vacante de Coordinadora de Marketing. Estaba emocionada, lista para arremangarme y entrar al ritmo de un equipo dinámico cuando, en lugar de conseguir el puesto de marketing, fui contratada como recepcionista.
Ese rol no era exactamente lo que tenía en mente, y se sintió como uno de mis primeros e inevitables "noes" en mi carrera; me colocaron en un puesto para el que no había aplicado, pero rápidamente cambié mi perspectiva porque después de todo ya tenía un pie dentro de la empresa. Aceptar el trabajo de recepcionista me acercó a mi visión y propósito, y realmente me mostró la importancia de tomar la iniciativa, ser proactiva y dejar que mi trabajo hablara por sí mismo, todo mientras navegaba, desde abajo, por la compleja dinámica de la empresa.
Esta experiencia temprana ahora me ayuda a guiar a los directores ejecutivos hacia su propia misión y propósito personal cuando enfrentan obstáculos, siendo flexibles, manteniendo la convicción y un objetivo final en mente. Aquí hay cuatro lecciones que he aprendido en el camino al convertir un "no" en un "sí".
1. Piensa en todo el trayecto
Navegar en el mundo corporativo requiere de un enfoque holístico: pensar en todo el viaje, desde diferentes perspectivas, desde su inicio hasta su ejecución. Pero también requiere pensar en ti mismo de manera holística. No siempre estarás en tu puesto actual, mantente abierto a asumir muchos roles más allá de tu descripción de perfil para contribuir a la experiencia del cliente de diferentes maneras.
Comencé como recepcionista, pero cuando el diseñador de esa empresa renunció, aproveché la oportunidad ofreciéndome para ayudar a diseñar anuncios para una reunión inminente con un cliente. Mi especialidad en diseño gráfico en la universidad y mi trabajo paralelo como diseñadora me prepararon para manejarlo. Pronto hacía de todo, desde contestar el teléfono, preparar café y salas de conferencias hasta presentar ideas de diseño a los directores ejecutivos de corporaciones exitosas y ejecutar esos diseños. Era una recepcionista recién graduada de la universidad creando anuncios millonarios, todo porque mantuve mi mente abierta. La investigación y el mantenerse alerta a nuevas oportunidades siempre son parte importante del viaje.
Mantente abierto a asumir muchos roles más allá de tu descripción de perfil para contribuir a la experiencia del cliente de diferentes maneras.
2. Experimenta y presenta tus ideas
Avancemos rápidamente hasta llegar al hoy: ahora soy jefa de mi propio equipo de marketing. En el trayecto he pasado de navegar por los "noes" a trabajar duro y tener un buen desempeño para garantizar el "sí". Cuando llegas a este punto un factor clave es experimentar, algo que no solo se hace cuando tienes tiempo o presupuesto extra. La experimentación es crucial para probar qué ideas funcionan mejor y mantenerse por delante de la competencia. Incluso si una prueba no sale según lo planeado, se puede utilizar para ajustar tu propuesta.
Por ejemplo, a pesar de una extensa investigación y planificación estratégica detrás de tus ideas, a veces el resultado inicial no refleja la profundidad de tu trabajo. Un juicio superficial puede hacer o deshacer una idea antes de demostrar su valía. Aquí es donde entra en juego la "prueba visual", que consiste en combinar estadísticas con intuiciones y observaciones. Con una presentación adecuada, darás a tus mejores estrategias la plataforma que merecen y mostrarás tu experiencia.
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3. Escucha, aprende y adapta
Si recibes un "no" de inicio, mantén la humildad, pero no dejes que te derrote. Habrá cosas que incluso la persona más preparada en la habitación no sabe. Escucha a los expertos a tu alrededor y absorbe el conocimiento de quienes tienen más experiencia que tú en ciertas áreas. Colaborar con otros equipos te saca de tu burbuja departamental y te permite entender mejor el panorama general.
Cada interacción es una oportunidad para aprender y fortalecer tus proyectos. Cuando las propuestas todavía están en la etapa teórica, llévalas afuera e investiga para obtener pequeñas piezas de aprobación. Al relacionarte con gente con diferentes habilidades, puedes rebotar tus ideas y obtener información crucial sobre cómo refinarlas. Así, para cuando llegues a la presentación, ya tendrás algunos aliados.
4. Descubre cómo obtener el "sí"
Las nuevas iniciativas no tendrán éxito a menos que estén alineadas con la visión general de la empresa, para que todos puedan ver cómo contribuyen a alcanzar los objetivos organizacionales. A menudo, después de un "no", en lugar de tomarlo como una señal del fracaso del equipo, pregunto: "¿Qué necesitamos hacer, mostrar o demostrar para escuchar un 'sí'?" Ahí es cuando saber escuchar se vuelve muy importante.
El tomar en cuenta los comentarios iniciales sobre los sondeos de tus propuestas fortalece el argumento para cada idea y proporciona pruebas tangibles de su eficacia a través de pruebas y conocimiento del cliente. Esto asegura que cada propuesta esté bien respaldada y claramente vinculada a la dirección estratégica de la empresa.
Sumérgete en los datos y ponte en el lugar de tu público objetivo relevante. Haz lo que sea necesario para demostrar por qué mereces un "sí" basado en tu investigación, conocimiento y experiencia. Demandará un poco más de trabajo y quizá una reinterpretación de tu enfoque, pero si te ayuda a superar ese "no", fortalecerá tu credibilidad y tu experiencia.
Cambia tu mentalidad
En el impredecible camino de construir una carrera, enfrentar el rechazo puede sentirse como golpear contra una pared. Pero está es la verdad: esos "noes" no son obstáculos; son desvíos que nos señalan nuevas oportunidades. No dejes que aplasten tu espíritu porque no es lo que tenías planeado. Abrázalos. Aprende de ellos. Si cambias tu mentalidad, esos contratiempos pueden ser escalones hacia algo mejor. Se trata de ser resiliente, de usar esos "noes" como combustible para seguir adelante, más fuerte y más inteligente.
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