Identificar y transmitir el propósito de tu empresa puede revolucionar tu modelo de negocio. Aquí te explicamos cómo lograrlo Descubrir y comunicar de manera efectiva el propósito de tu empresa puede mejorar su rendimiento, la relación con los clientes y en general, su éxito en el mercado.
Por Chris Kille
Key Takeaways
- Descubrir y comunicar el "por qué" (propósito central) de tu empresa es crucial para conseguir la lealtad de los clientes, diferenciar tu marca, y atraer y retener talento.
- Para comunicar tu "por qué", necesitas integrarlo en cada función organizacional y considerarlo al desarrollar tu estrategia empresarial.
- Un "por qué" sólido puede transformar un negocio al crear conexiones emocionales con los clientes, impulsar la satisfacción de los empleados y ofrecer una ventaja competitiva más allá de las características o el precio del producto.
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La profunda afirmación de Simon Sinek, "La gente no compra lo que haces, sino por qué lo haces", es un mensaje importante para cualquiera que quiera darle significado a su trabajo. Este concepto no se trata solo de conocer tus productos o servicios; se trata de identificar lo que motiva a la organización y de ser capaz de transmitir ese mensaje.
Me gustaría hablar sobre el proceso de encontrar y utilizar tu 'por qué', y cómo eso cambió mi empresa.
Descubriendo el "por qué"
Cuando inicié mi negocio, todo lo que me preocupaba era el "qué" y el "cómo". Pensaba que si hacía mejores productos mis competidores y ofrecía excelentes servicios, los clientes vendrían corriendo. Mi equipo y yo pasamos muchas horas puliendo características, perfeccionando operaciones y mejorando nuestra presentación. Sin embargo, por mucho que lo intentamos, no logramos desarrollar relaciones duraderas con los clientes. Nos faltaba algo importante.
Fue durante una sesión de retroalimentación con clientes cuando un comentario resonó en mí: "Muy bien, me gusta tu producto, pero no me siento relacionado con tu marca". Esto me abrió los ojos, inmediatamente comprendí que, aunque habíamos dominado el "qué", habíamos ignorado por completo el "por qué". Los clientes no solo buscaban un producto; querían saber lo que había detrás de él. Querían ser parte de algo que fuera más allá de una simple compra.
El proceso de identificar nuestro "por qué" fue toda una introspección que, en primer lugar, me obligó a pensar en lo que me motivó a crear el negocio. No se trataba solo de identificar una necesidad y satisfacerla; se trataba de crear algo que impactara positivamente en la vida de las personas. Esto nos llevó a nuestra declaración de propósito: "Innovar y ofrecer soluciones que hagan la vida más fácil y proporcionen experiencias más enriquecedoras".
Comunicar el "por qué"
Una vez identificado nuestro "por qué", el siguiente paso fue asegurarnos de transmitirlo de manera adecuada. El simple hecho de decir de qué se trata no es suficiente; teníamos que integrar el propósito en cada función organizacional. Así es como lo hicimos:
1. Narración auténtica
Se dice que las personas no leen números, sino historias. Comenzamos a contar la historia de la empresa, los problemas que enfrentamos y la inspiración detrás de las innovaciones que realizamos. Esta autenticidad tocó a nuestra audiencia, les recordó a todos que hay personas reales detrás de la marca y mucha pasión en nuestro trabajo. Las historias de cómo nuestros productos ayudaron a los clientes también nos recordaron por qué hacemos lo que hacemos y nos dieron un toque emotivo.
2. Consistencia en todos los canales
Nuestro "por qué" tenía que ser evidente en cada punto de contacto, desde el sitio web hasta nuestras redes sociales, estrategias de marketing y compromisos con los clientes. Este mensaje consistente también sirvió para crear una imagen de marca poderosa y fácilmente identificable. Cada pieza de contenido que se creó, cada anuncio que se colocó y cada llamada de servicio al cliente, se realizó con una intención.
3. Compromiso con los clientes
También involucramos a los clientes en nuestras operaciones y los incluimos como un público interesado en nuestra empresa. Para lograr nuestro objetivo incorporamos las historias, el contenido y las actualizaciones de lo que sucede detrás del escenario en las plataformas de redes sociales. Instamos a los clientes a expresar cuál es su "por qué" y los escuchamos, lo que no solo ayudó a profundizar nuestro vínculo con ellos, sino que también atrajo a nuevos clientes que compartían nuestra visión.
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El impacto de un "por qué" sólido
Tan pronto como adoptamos y compartimos nuestro "por qué", descubrimos que no solo impactó la retención de clientes, sino también la percepción general que se tenía de la marca e incluso la satisfacción de los empleados. Aquí hay algunos ejemplos de cómo lograrlo:
1. Diferenciación en un mercado competitivo
Frente a una gran competencia, nuestro "por qué" nos dio la ventaja necesaria. Le dio a la audiencia una perspectiva nueva que provocó una respuesta emocional. No se trataba solo de que los clientes consumieran nuestros productos; se estaban convirtiendo en parte de nuestro sueño. Esta diferenciación fue muy efectiva y nos permitió superar a los competidores que tendían a enfatizar solo las características y el precio.
2. Construcción de lealtad del cliente
Ese "por qué", constante y extremadamente poderoso, ayudó a cimentar la lealtad. Lo hizo porque los clientes se identificaban con nuestra marca no solo en cuestión del servicio, sino también de creencias. Esto estableció la base para construir la lealtad del cliente, que se expresó en visitas recurrentes y recomendaciones de boca en boca. Nos ayudó a convertirnos en una marca, asociada con una visión interesante y promovida ante personas de ideas afines que podrían convertirse en nuestros clientes.
3. Atracción y retención de talento
Nuestro "por qué" también fue fundamental para la atracción y retención de empleados, dos consideraciones importantes para cualquier organización. Los empleados buscan participar en organizaciones que abracen sus creencias y les proporcionen algún tipo de significado. Recurrir al concepto de "por qué" nos permitió contratar a personas afines que estaban verdaderamente interesadas en nuestra misión y dispuestas a aportar todo lo necesario para ser testigos del éxito de nuestra empresa.
Pasos prácticos para implementar tu "por qué"
Entender la importancia de tu "por qué" puede ser fácil; sin embargo, ponerlo en práctica es una historia completamente distinta. Aquí hay algunos pasos prácticos que nos ayudaron a integrar nuestro "por qué" a la estrategia empresarial:
1. Incorpora tu "por qué" a la cultura organizacional
El "por qué" debe ser evidente en la cultura de tu empresa y en tus actividades diarias. Cuando se trata de los servicios que ofreces, asegúrate de que lo haces con un objetivo claro en mente. Es indispensable reconocer los logros que indican un compromiso con el "por qué" y utilizarlos para mostrar a otros lo que está en juego y motivarlos.
2. Mide el impacto y adapta
Cuantifica los efectos de tu "por qué" en tu negocio para que puedas seguir el progreso a lo largo del tiempo. Verifica los niveles de lealtad del cliente, las impresiones de la marca y la satisfacción de los empleados para ver qué tan bien estás promoviendo y arraigando tu propósito. Aplícalo al tomar decisiones y mejorar continuamente tu enfoque.
3. Comprométete con tu comunidad
Usa las redes sociales para conectar con tu audiencia a un nivel más profundo, contándoles por qué haces lo que haces e invitándolos a ser parte del proceso. Publica fotos, opiniones y logros en las redes sociales, envía boletines informativos y realiza eventos en la comunidad que influyes, comparte historias y actualizaciones que reflejen tu propósito. Las personas deben poder identificarse con tu "por qué", y debes motivar a tus clientes a compartir sus propias experiencias con su "por qué" contigo.
Descubrir y compartir nuestro "por qué" ha sido uno de los mayores factores de cambio en mi negocio. He descubierto que nos permite entender mejor a nuestros clientes y enfocar nuestro desarrollo. En resumen, tu "por qué" es la esencia de tu negocio. Cultívalo, comunícalo y observa cómo puede revolucionar tu marca e impulsar tu negocio.