Meta y Twitter buscan ser la nueva competencia de LinkedIn Las redes sociales de Meta y Twitter han encontrado una manera práctica para que las empresas busquen personas para sus vacantes.
Por Entrepreneur en Español Editado por Eduardo Scheffler Zawadzki
Las redes sociales se encuentran en la peor crisis de su historia y el ejemplo de esto son las grandes olas de despidos en los gigantes de la industria, como Twitter y Meta —dueño de empresas como Facebook, Instagram y WhatsApp—.
Los problemas económicos de estas compañías han provocado que sus propietarios hayan cambiado su visión y planten cambios dentro de las mismas. Y una de esas modificaciones es el recorte de personal, con el objetivo de reducir gastos.
En contraste, a partir de la pandemia de COVID-19, se ha acelerado la revolución digital de los recursos humanos, que incluye la búsqueda de empleo y la localización de profesionales.
Relacionado con esto, se encuentra la evolución de las redes profesionales a un modelo de negocio, mismo que depende de los datos de candidatos y empresas, antes que en cubrir vacantes.
Los portales tradicionales de búsqueda de empleo han caído en los últimos años y de forma opuesta, surgió el auge de plataformas como LinkedIn.
El crecimiento de esta red social ha provocado que Elon Musk, con Twitter, y Mark Zuckerberg, con Meta, busquen implementar herramientas que sigan este camino, pues ha cobrado relevancia como alternativa de negocio.
Y es que LinkedIn, propiedad de Microsoft, ha crecido mucho más en los últimos años que muchas redes sociales tradicionales.
Sin embargo, de momento, aún opera de la manera tradicional, pues las empresas publican vacantes y los usuarios están ahí para buscar cubrirlas.
Las empresas se han dado cuenta de que los portales no son capaces de reconocer los perfiles adecuados, lo que ha causado que pierdan a los mejores candidatos.
Debido a lo anterior, lo cual, de acuerdo con expertos, es provocado por los algoritmos de búsqueda, las redes profesionales se reorientan hacia un enfoque Business to Business, que está basada en el funcionamiento de las redes sociales, que no es centrarse en el cliente final (las empresas o los candidatos) sino al intermediario (reclutadores y empresas de gestión del talento).
Es aquí donde Meta y Twitter han realizado un trabajo silencioso, emulando su labor como plataformas sociales para encontrar un valor cualitativo y no cuantitativo.
Por ejemplo, muchas empresas han encontrado en Twitter una manera de ofertar empleos y que miles de personas llegue por ellas.
Es por eso que las compañías o potenciales empleados prefieren pagar su suscripción Twitter Blue, pues es más barata que la de LinkedIn.
Actualmente, la demanda empieza a desinflarse. Así lo refleja el índice de contratación de LinkedIn. En el último año registra un desplome global, con España retrocediendo más que Estados Unidos o Francia y el doble que Alemania.
Esta caída no puede aislarse de los recortes de plantilla anunciados estos días por Twitter y Meta.
Sin embargo, los recortes de Meta y Twitter y la Gran Renuncia, que consiste en que millones de trabajadores norteamericanos dejaron sus empleos, debido a que no estaban conformes con sus condiciones, LinkedIn ofrece a los despedidos de ambas redes cuentas premium de manera gratuita para ayudarles a encontrar su próximo empleo.
Y es una paradoja, pues mientras las redes sociales tradicionales aprovechan los vacíos de LinkedIn, esta plataforma aprovecha los despidos de personal especializado de los que buscan hacerle competencia.