Trabajador transfiere €24 millones de euros a estafadores tras videollamada deepfake El empleado de una empresa multinacional fue engañado de una manera nunca vista.

Las estafas virtuales han alcanzado un nuevo nivel, ya que un trabajador financiero de una empresa multinacional transfirió casi €24 millones de euros a estafadores que utilizaron la tecnología deepfake para engañarlo.

El caso, revelado por la policía de Hong Kong, es el primero que involucra una videollamada grupal falsificada y una suma significativa de dinero.

Según informes de Bloomberg, el empleado recibió un correo electrónico a mediados de enero, mismo que inicialmente levantó sospechas de phishing.

Supuestamente enviado por el director financiero de la empresa, desde su sede en Reino Unido, el mensaje indicaba al trabajador que llevara a cabo una transacción de manera confidencial.

Lo que hizo única a esta estafa fue la sofisticada manipulación de una videollamada grupal mediante la tecnología deepfake.

De acuerdo con CNN, el superintendente principal en funciones, Baron Chan Shun-ching, explicó que, a diferencia de casos anteriores, donde las víctimas eran engañadas en videollamadas uno a uno, esta vez fue "en una videoconferencia multiusuario, resulta que todos los que ves son falsos".

Durante la videollamada, los estafadores presentaron recreaciones digitales convincentes del director financiero y otros empleados de la empresa, utilizando imágenes y grabaciones disponibles públicamente.

Además, emplearon la tecnología deepfake para imitar las voces de los objetivos, leyendo un guion cuidadosamente elaborado.

A lo largo de una semana, el empleado realizó un total de 15 transferencias, sumando €23.8 millones de euros, antes de darse cuenta del engaño al consultar con la sede de la empresa.

Las autoridades advirtieron sobre la creciente sofisticación de las herramientas de los estafadores y subrayan la importancia de verificar la autenticidad de las interacciones virtuales.

El superintendente Chan instó a la precaución, recomendando sospechar inmediatamente si se solicita dinero y aconsejando la realización de comprobaciones adicionales, como solicitar movimientos específicos o hacer preguntas que confirmen la autenticidad de la persona en la pantalla.