Cómo desbloquear tu potencial de liderazgo mediante el juego de identidades y la experimentación Incorporar el juego de identidades en tu desarrollo como líder puede ser un cambio radical. En vez de abandonar lo que ya es efectivo, este método se centra en probar distintos aspectos de tu identidad como líder.

Es posible que, en algún momento de tu carrera, te encuentres estancado confiando en enfoques de liderazgo desactualizados que no están alineados con los nuevos desafíos y dinámicas que enfrentas en tu industria u organización. En otros casos, un cambio de trabajo puede llevarte a un entorno organizacional o sector desconocido, lo que te obligará a desarrollar rápidamente las competencias necesarias para tener éxito en tu nuevo rol.

Estos escenarios requieren que te adaptes a nuevas normas culturales, procesos de toma de decisiones y dinámicas operativas, muchas veces con escaso apoyo de incorporación o desarrollo. La tasa de fracaso para los líderes que enfrentan estos nuevos desafíos es sorprendentemente alta, alcanzando entre el 40% y 50% en ciertas industrias.

Si te sientes identificado con esto, no estás solo. El informe global de liderazgo de DDI, basado en encuestas a 1,827 profesionales de Recursos Humanos y 13,695 líderes de 1,556 organizaciones en todo el mundo, revela que solo el 12% de los líderes se consideran efectivos en cinco competencias críticas de liderazgo. Además, solo el 29% de los encuestados reportó que sus empresas brindan capacitación para desarrollar esas habilidades esenciales. Por otro lado, el informe de tendencias en aprendizaje y desarrollo de SHRM indica que el 55% de los encuestados creen que necesitan más formación para desempeñarse eficazmente, mientras que el 75% sienten que la capacitación que reciben no es la que necesitan.

Estas estadísticas reflejan una brecha significativa en cuanto al apoyo que reciben los líderes para desempeñarse de manera eficaz. Cuando estas carencias persisten, los impactos en sus carreras, equipos y organizaciones pueden ser enormes. Sin embargo, existe una solución que no requiere una completa reestructuración del área de desarrollo de tu organización, ni una inversión en un título formal o un nuevo certificado. Esa solución es: el juego.

Por supuesto, no me refiero a cualquier tipo de juego, sino al "juego de identidades", un concepto ampliamente estudiado por la experta en liderazgo Herminia Ibarra, quien ha enseñado en instituciones como London Business School, INSEAD y Harvard Business School. Ibarra describe el juego de identidades como la experimentación con nuevos comportamientos y enfoques para descubrir y afinar aquellos que se adaptan mejor a tu entorno y a los desafíos que enfrentas.

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Adoptando el juego de identidades para el desarrollo de liderazgo

El concepto de juego de identidades ofrece una solución dinámica y flexible para los líderes que desean crecer. A diferencia del "trabajo de identidad", que implica conformarse con las expectativas actuales, el juego de identidades se trata de experimentar: probar nuevas identidades y explorar posibles versiones futuras de uno mismo sin necesidad de un compromiso inmediato. Al participar en este tipo de juego, los líderes pueden expandir sus límites y descubrir formas innovadoras de liderar.

El juego de identidades se trata de experimentar: probar nuevas identidades y explorar posibles versiones futuras de uno mismo sin necesidad de un compromiso inmediato.

Un ejemplo real de un líder que aplicó el juego de identidades es Ben Horowitz, cofundador de Andreessen Horowitz. En su libro The Hard Thing About Hard Things, Horowitz explica cómo los líderes deben explorar diferentes aspectos de su identidad para adaptarse a los desafíos. Horowitz experimentó con dos identidades de liderazgo: la de un pensador estratégico y la de un operador orientado a procesos. Este enfoque le permitió tomar decisiones complejas, mientras delegaba tareas operativas a un director de operaciones con fortalezas complementarias. La habilidad para manejar estas identidades le permitió liderar con mayor eficacia, reconociendo sus propias limitaciones y adaptándose en consecuencia.

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Cinco pasos para incorporar el juego de identidades

1. Crea espacios seguros para la experimentación: Establece un espacio seguro para la experimentación, como un proyecto especial, ejercicio en equipo o taller. El enfoque debe ser probar nuevos enfoques, no lograr el éxito inmediato. Como líder, modela esta práctica asumiendo nuevos desafíos en estos entornos.

2. Prueba nuevos roles de liderazgo: Elige un comportamiento de liderazgo que desees ensayar. Este comportamiento debe estar fuera de tu enfoque de liderazgo habitual. Por ejemplo, si normalmente eres un gerente muy involucrado, intenta darle más autonomía a tu equipo. Si sueles ser más reservado y analítico, intenta liderar con más compromiso emocional en ciertas situaciones. Reflexiona sobre lo que funciona y lo que no, pero date la flexibilidad para intentarlo de nuevo en diferentes contextos.

3. Busca modelos de liderazgo diversos: En lugar de aferrarte a un arquetipo único de liderazgo, explora diferentes modelos de líderes en varias industrias y estilos de liderazgo. Toma elementos de cada uno que te resuenen y crea tu propio estilo de liderazgo a través de la emulación selectiva. Por ejemplo, observa cómo diferentes líderes manejan los momentos de crisis y experimenta con esos enfoques en tu organización.

4. Reformula el fracaso como aprendizaje: Adopta la perspectiva de que el fracaso es una oportunidad para aprender, en lugar de algo que debes evitar. Ibarra observó que los líderes que adoptan esta "mentalidad de aprendizaje" en lugar de enfocarse solo en el desempeño, tienden a tener más éxito a largo plazo.

5. Reflexiona y adapta: Reflexiona sobre lo que has aprendido y continúa con el proceso de juego de identidades para desbloquear tu potencial de liderazgo. Después de cada experimento, reflexiona con preguntas como: ¿Qué me resultó auténtico? ¿Qué se sintió incómodo y por qué? Con el tiempo, desarrollarás un estilo de liderazgo que no solo refleje quién eres, sino que también evolucione para satisfacer las necesidades de tu organización y equipo.

Incorporar el juego de identidades en tu desarrollo como líder puede marcar una gran diferencia. No se trata de desechar lo que ya funciona, sino de ampliar tu conjunto de herramientas de liderazgo. Al experimentar con diferentes aspectos de tu identidad como líder, te volverás más adaptable, auténtico y capaz de navegar las complejas demandas del entorno laboral.