General Motors ya trabaja en un Corvette 100% eléctrico La versión eléctrica del este clásico norteamericano podría llegar al mercado este mismo año, lo que significa una gran noticia para el segmento de los deportivos.
Por Eduardo Scheffler Zawadzki Editado por Eduardo Scheffler Zawadzki
Un auto clásico se volverá eléctrico. Se trata del Corvette y su transformación solo confirma que la industria automotriz se ha volcado completamente hacia la electricidad. Mark Reuss, presidente de General Motors dio a conocer la noticia a través de su cuenta de LinkedIn: "Además del increíble nuevo Chevrolet Corvette Z06 y otras variantes de gasolina que se avecinan, en el futuro ofreceremos un Corvette electrificado y completamente eléctrico basado en Ultium. De hecho, ofreceremos un Corvette electrificado a partir del próximo año".
Reuss explicó además que la empresa ha desarrollado un sistema que aprovecha el calor emitido por las baterías para calentar la cabina del vehículo, mejorar la aceleración, crear condiciones de carga más eficientes y brindar mayor autonomía. El término "electrificado" es utilizado en la industria para describir a los vehículos híbridos, por lo que pudiera ser que antes de que General Motors presente al Corvette 100% eléctrico, existe una versión que combine la electricidad con un motor de combustión.
Aunque la industria de los autos eléctricos ha crecido a pasos agigantados, el segmento de los deportivos no ha abrazado todavía esta tecnología. Algunos fabricantes han manifestado que no existen baterías capaces de satisfacer las necesidades de un vehículo 100% eléctrico, pese a que el primer Tesla, el Tesla Roadster, fue un deportivo eléctrico.
Actualmente Acura, BMW, Ferrari, McLaren, Mercedes, Lamborghini y Porsche trabajan en versiones de sus autos deportivos que puedan cumplir con lo que se espera de ellos.
El primer Corvette fue presentado el 30 de junio de 1953 y se produjeron solo 300 unidades. Se trataba de un vehículo convertible blanco, con vestiduras rojas y un motor de seis cilindros. Fue la respuesta de General Motors a los autos deportivos británicos. El modelo fue bien recibido en los Estados Unidos y se convirtió en un icono de la industria automotriz de ese país. De aspecto más clásico en un principio, el Corvette adquirió su característico look aerodinámico (más similar al que conoceos hoy en día) en 1963 con la llegada del Sting Ray.